Somnifabrik Hotel - Restaurante - Valderrobres, Teruel

CRISTINA D. L. L. P.

Muy cuidado en cuanto a la decoración. Habitaciones limpias y cama muy cómoda. El entorno es tranquilo y bonito. Nos faltó un poco de información a nuestra llegada. Pero en general estamos contentos, repetiremos!

Antonio M.

Casi 3 horas para comer, así de lentos han sido... Además el restaurante NO nos han dejado pedir a la carta (wtf 🤷), ni tampoco elegir entre los menús que tenían publicados en su página, queríamos pedir chuletón y algo más pero nos obligaban en todo momento a pedir el mismo menú cerrado las 8 personas de la mesa cuando en su carta no lo requería de esa manera, una pena porque tenía buena pinta pero este detalle ha arruinado toda la experiencia. No les iría mal un poco de empatía y humildad con sus clientes siendo un restaurante de +60€ por cabeza...

Papá M.

Un sitio ideal para una escapada de fin de semana o para estancia de varios dias. La decoracione es increible, ver como transformas una antigua fabrica de papel en un hotel y aprovechas todo lo que habia para incluirlo en el es una pasada. El servicio es muy vueno, gente siempre preocupada por ti para que disfrutes al maximo de la estancia con ellos. La comida buenisima, platos de todo tipo con un sabor estupendo. Volvere seguro.

EF R.

estuvimos ahí hace dos semanas haciendo el brasa & music, a ver tengo varios puntos que decir el lugar es espectacular, está todo muy limpio, muy bien pensado y organizado, el servicio es un 10/10, las instalaciones son muy bonitas y muy cuidadas, eso me encantó.
Ahora bien vamos con las cosas negativas, el menú costaba 50 euros, no incluía la bebida, había buffet de entrantes y de postres, el buffet de entrantes no estaba mal pero nos esperábamos un poco más de “punch” en los sabores, era todo bastante básico, tenías a elegir de plato principal carne, pescado o vegetariano, mi pareja eligió carne y yo pescado, la carne no era de la máxima calidad, la morcilla estaba seca y dura, el entrecot le faltaba sal y estaba duro, claro ves que tienen una brasa espectacular y un ahumado brutal y tienes las expectativas altas no, altísimas… la patata de guarnición estaba fría y cruda, no se nos esperábamos una guarnición un poco mejor o más “currada”, yo pedí pescado la verdad estaba bueno , cocción bien y no tengo ningún pero estaba normalito.
Los postres que en teoría también eran “buffet”
solo había brownie, cremoso de limón y cuajada que la cuajada estaba casi deshecha, y no había ninguna variedad de postres más que 3 y no invitaban mucho a probar. Es una pena y me sabe muy mal porque el marketing del instagram es todo muy espectacular! y me hubiera encantado irme con un sabor de boca igual de espectacular. A nuestra perspectiva dejó muchísimo que desear la comida por el precio que pagas… que pagamos casi 190 euros entre dos…

Una lástima y espero que mejoren esos aspectos!! que el lugar es muy chulo y el servicio también

Dolores L.

Es un hotel emplazado en un entorno maravilloso, con un río y arboleda.
El acceso es de tierra aproximado 500 metros de camino rustico no apto para coches bajos. Escasa señalización. Dormitorio muy cómodo. Desayuno con gran presentación y escaso genero.
No tienen te negro y eso es complicado para los que no tomamos café. Muy extraño en un hotel tan cuidado.! Al no tener kettle en el dormitorio te limitan las opciones. Afortunadamente los 3 días encontré donde tomar buen té y pastelería artesanal de la zona.Casalduc.Valderrobles.

Raquel A.

Lugar encantador para desconectar , trato espectacular por los trabajadores y amabilidad por parte de los dueños.
Habitación increíble, muy confortable y agradable.
La comida espectacular, todo muy bueno, muy bien presentado. El desayuno fue gratamente sorprendente.
Sitio totalmente recomendable.

SONIA M.

Hemos pasado unos días en Semana Santa, ideal para desconectar y descansar. Habitacion amplia y cómoda.El restaurante Somiar un 10. Cocina de calidad. Nos han tratado muy bien. Sin duda volveremos.

Belén M. P.

Estuvimos comiendo un viernes, el lugar es magnífico, un comedor amplio y original desde el que se ve a los cocineros preparando la comida. Era un menú degustación y todos los platos nos gustaron mucho, en especial la espuma de ajoblanco y el postre de melocotón en distintas texturas.
Al terminar dimos una vuelta por el exterior, y nos pareció espectacular y muy cuidado.
Fue una bonita experiencia.