Restaurante Lúbora - Boadilla del Monte, Madrid

Sandra T.

🍽️ Fuimos a comer la semana pasada y me encantó el sitio. Todos los platos estaban exquisitos, con sabores equilibrados y con un punto de originalidad.
Pedimos varios platos a compartir, algunos fuera de carta:
• Ceviche: Un 10.
• Salmorejo con sardina ahumada
• Tiradito de salmón
• Enmoladas de ciervo
• Tarta de manzana: Deliciosa, con un toque diferente por los Peta Zeta.
Además, nos pusieron como entrante cortesía de la casa un gazpacho de remolacha muy rico y fresquito. 🔝

🪑 El restaurante es espacioso y con encanto, el ambiente es muy agradable en el salón interior. También disponen de terraza.
La atención al cliente es muy buena, te explican en detalle los platos y te recomiendan con tino. Los camareros son atentos y van rápido.

💸 Buena relación calidad-precio. Nosotros nos gastamos 45€ por cabeza pidiendo alguna copa vino y postre.

💡 Reservamos a través de aplicación El tenedor y había un descuento del 20% en los platos principales.

➕La decoración de las paredes tiene unas fotos entrañables de varios perretes. 💕

Carlos P. G.

Excelente sitio!

Altamente recomendable su visita. Si quieres disfrutar de un entorno agradable un trato exquisito y una cocina muy bien desarrollada.

Además, si eres de la zona de Boadilla contarás con la ventaja de estar situado dentro de la zona de Infante, don Luis y su influencia. Por lo tanto evitarás no poder dejar el coche en ningún sitio.

En este caso al estar situado fuera de este área de influencia, tendrás la ventaja de poder aparcar con una cierta facilidad.

Muy recomendable su visita!

Carlos R. M.

Maravilloso
Hacía tiempo que no me sorprendían tanto y tan gratamente
Platos tradicionales con toques modernos y diferentes.
Producto de calidad con excelente servicio
No os perdáis el salmorejo

Nacho P.

La comida estaba muy rica, pero los platos eran pequeñitos y el precio algo elevado.
Un lugar tranquilo y familiar.

Bea R.

Hemos podido probar unos cuantos platos de este restaurante y la verdad es que estaban todos muy bien.
Algunos poca cantidad, pero muy sabrosos e innovadores. Lo que menos me gustó fue el postre, la tarta de manzana no me encantó porque casi todo era helado y lo que más me gustó fueron los canelones de pollo. El tartar de atún muy bueno y los torreznos bien. Los callos y las albóndigas, son los platos más contundentes. Las berenjenas en su punto, riquísimas pero demasiado caras.

Guillermo D. L. C.

Disfrutando en el Lúbura en Boadilla del Monte en Madrid, uno de los mejores restaurante que he conocido últimamente, una experiencia maravillosa, su cocina de unas las fusiones más extraordinarias que he podido conocer, donde combina a la perfección esa cocina de sabores de antaño, cocciones lentas y con sentido, donde todo está perfectamente equilibrado y armonizado en mi caso con un maridaje perfecto, yo escogí el Menú Degustación Sorpresa donde los chefs eligen tus platos según temporada, según ellos consideran para que tu experiencia sea única y aciertan seguro al menos conmigo lo han logrado.

También tienen carta si lo deseas, de echo su fuerte esta en carta y si vas de lunes a jueves el menú degustación puedes escogerlo, pero viernes, sábado y Domingo tienes que encargarlo. Y el Local es precioso y acogedor, pero con lo que más me quedo de todo es la calidad del equipo.

Recomendable al 100%

ARG F.

Ya lo conocíamos, pero una vez vas a Lúbora... No te queda más remedio que volver. El servicio estupendo y amable, y súper rápido. En esta ocasión nos acercamos a probar su tapa en la ruta de la tapa de Boadilla, y no defraudó, un siumai RIQUÍSIMO.
Y como ya estábamos allí, no pudimos resistirnos a pedir la berenjena con almogrote (que estaba tan buena que nos la comimos antes de echarle foto), el torrezno, el brioche que estaba de muerte!! (y muy sorprendente he de decir), y, por supuesto, la guinda del pastel fue la famosa "Leche con galletas" del chef, que es un verdadero must. Recomendadísimo.

Ana O. F.

Nos encanta Lubora! Hemos ido ya varias veces y nunca defrauda. Comida espectacular y servicio súper amable.
Obligatorio probar sus callos, los mejores que hemos comido nunca.