Restaurante BEST Princesa - Madrid

Diego L. R. B.

Como viajero apasionado por la gastronomía, pocas cosas me entusiasman más que descubrir lugares donde el producto, la técnica y el servicio se alinean de forma natural. Eso fue exactamente lo que encontré en Best Princesa, un restaurante moderno y luminoso en el corazón de Madrid, ideal tanto para locales como para visitantes exigentes.

Mi experiencia comenzó con la ensaladilla rusa estilo BEST, un entrante correctamente ejecutado, aunque en mi opinión le faltó un punto de fuerza para estar al nivel del resto de la propuesta.

A partir de ahí, la experiencia solo fue en ascenso:
• Alcachofas a la brasa: sencillamente sublimes. Cocinadas con maestría, lograron ese equilibrio perfecto entre textura y sabor que convierte un plato en memorable.
• T-Bone de 700 g: ideal para compartir entre dos personas (39 €), servido en su punto, jugoso y con una guarnición bien equilibrada. Un corte que demuestra conocimiento del producto y del gusto del comensal. Lo único que faltó fue preguntar el punto de cocción algo totalmente necesario.
• Café: bien servido, con la temperatura y la presentación adecuadas, cerrando la experiencia con un broche clásico pero cuidado.

El servicio fue impecable: cercano, profesional y atento a los detalles. El local, por su parte, combina un diseño contemporáneo con amplitud y buen ambiente, lo que refuerza la sensación de estar en un espacio pensado para disfrutar.

¿Recomendaría Best Princesa? Absolutamente.
Volveré —y seguramente más de una vez— por esas alcachofas que ya se han ganado un lugar entre mis imprescindibles de Madrid.

Alfredo C.

Comí de menú el pasado día 05/06 y la verdad es un menú muy normalito. Cuando lo lees parece que va a ser más de lo que es. Ensalada muy normalita, nada que destacar. El segundo creo que era un pollo al curry o tikka masala, no recuerdo muy bien. El error es en llamarlo así porque si te encanta la comida hindú comparar es obligatorio. No tiene nada que ver. La tarta buena.

Jose M. P.

Trato increíble! Equipo brutal. Tanto para tomar algo como para cenar.
Fabian siempre nos trata genial, nos recomienda y nos consigue mesa aunque estén llenos.
Sin lugar a duda uno de nuestros sitios favoritos
A los niños los tratan genial.

Muy muy recomendable

Rocío C.

todo espectacular tomamos bacalao súper bueno y la ensalada también tomamos el poque de salmón y milanesa todo muy bueno y cantidad apropiada los postres también buenísimos la tarda de queso espectacular

Loic D.

Restaurante muy buen, lo hemos encontrado por casualidad, el personal nos recibió muy bien y la comida casera era muy buena, muy recomendable

Samuel M.

Es un restaurante que está dentro de un hotel. El hall, donde está la barra, es un espacio muy amplio y está todo muy bonito y limpio (con varios espacios para comer, picar algo o tomar café y/o copas). Nosotros comimos a la carta aunque tienen un menú diario con muy buena pinta (por lo que vi en las mesas de al lado) y a un precio muy ajustado. Nosotros pedimos tres platos para compartir y estaba todo bastante rico. Calidad-precio, es una propuesta bastante interesante. Quiero ir otro día a probar el menú, seguro. Y el servicio, bien. Fueron muy majetes aunque tenían bastante follón y quizás, algo de desorganización. Pero la experiencia fue positiva.

Victor M.

Una grata sorpresa el cenar anoche en el restaurante.
El local es bonito, tranquilo y buen ambiente.
Mención especial para Juan que nos atendió genial desde que llegamos hasta que nos fuimos.
La cena estuvo muy rica, a destacar los huevos rotos con trufa.
El precio está un poco por encima de la media en algunos platos pero no es excesivo.
Lo recomiendo y volveré a probar el risotto que nos quedó pendiente.

Juan C.

Un lugar que no conocía y que para cerrar una semana de trabajo en Madrid me sorprendió.
Muy acogedor, bien decorado y un buen ambiente.
El servicio muy bien, Cristian nos atendió con mucha eficiencia.
La comida me gustó mucho. El salmorejo muy bien presentado, no le hizo foto, estaba de vicio. El entrecot, que pedí poco hecho, estaba como lo pedí, poco hecho. Genial. Nos pusieron también unas alcachofas para chuparse los dedos. Y de remate una tarta de queso como pocas.
Llame al cocinero y es un chico joven muy agradable y que espero que triunfe. Se lo merece.
Repetiré.