Olatzea Landa Hotela - Arbizu, Navarra

jrlobatol

Hotel con buenas instalaciones y servicios. Habitaciones amplias , cómodas y completas . Buena limpieza y trato del personal. Valen , su gestora, muy amable y eficaz. El hotel es un antiguo molino que lo ponen en funcionamiento para el disfrute de los clientes .Dispone de un buen comedor de Sidrería en la parte sótano del establecimiento. En la planta baja dispone de un comedor donde disfrutar de una cocina de calidad. Un buen lugar para pasar unos días disfrutando de rutas , descanso y buena gastronomía.

Idoia G.

Impresionante.
El personal un 10, tanto la chica del bar como Valen, la dueña, un encanto de persona.
En el bar se cena de lujo lujo, nos hemos comido la mejor hamburguesa que hemos probado en la vida, exageradamente buena.
El desayuno con mucha variedad, diferentes bizcochos caseros también buenísimos...
Hacen todo con mucho cariño y se nota.
Y por último la estancia, súper acogedora, con unas vistas muy bonitas.
La habitación preciosa,espaciosa, limpia, no sé... Esque todo lo que puedo decir de este lugar es bueno. Nos vamos encantados de verdad y con ganas de volver pronto.

Eskerrik asko por hacernos sentir tan bien.

Angel U. L.

Sitio muy chulo , no he visto las habitaciones , pero el salón tenéis vídeo muy bonito y bien decorado para descansar y mucha tranquilidad.
He
Os comido el menú de sidrería le pondría un 4 , pero el servicio y su amabilidad y atenciones de diez, ya que estábamos en Arbizu muy bien empezar por txistorra , la tortilla de bacalao estupenda , el bacalao con pimientos bien normal , el chuletón para mi hubiese puesto platos calientes y menos hecho y para finalizar el queso muy muy rico
Se agradece la amabilidad y las atenciones
Por cierto las patatas fritas mejor caseras

Miguel ?. L.

No llegamos a quedarnos a dormir por la pésima gestión de las incidencias por parte de la encargada, además de su nula capacidad para reconocer errores y su prepotencia.
Teníamos contratada una noche en una habitación con bañera de hidromasaje, la cual, una vez que ya habíamos comido y nos había recibido, al ir a hacer el check-in, nos dijo que no podía ofrecernos porque había un error en su propia página web y no tenía disponibles habitaciones con bañera de hidromasaje. Dicho error nos reconoció que había sido detectado el fin de semana anterior, y se había repetido el día anterior a nuestra llegada.
Lejos de reconocer y subsanar dicha incidencia, se amparó en la ley de protección de datos cuando le sugerimos que lo apropiado habría sido avisarnos telefónicamente de dicho error en el momento en que había sido detectado. Y, además, nos ofreció una habitación sin la bañera de hidromasaje pero por el mismo precio que habríamos pagado por la habitación que sí la tenía, según ella porque la habitación con hidromasaje costaba mucho más.
Nos ofreció la posibilidad de no hacer el check-in sin tener coste alguno, lo cual aceptamos debido principalmente a la ausencia de autocrítica de la encargada, ya que ni si quiera llegó a pedirnos disculpas por el error.
Sí podemos decir que comimos de forma sabrosa y abundante en la sidrería, con un personal de sala ciertamente agradable.

I.E.A.

Lo que más me gustó fue la amplitud de la habitación, la limpieza, la temperatura en invierno (incluso demasiado calor), el trato cercano de la dueña, la tranquilidad de la zona y la comida del restaurante.
Respecto a la comida, tanto el desayuno como el resto de productos que probamos en la cena o la comida nos pareció que tenían muy buena materia prima.
Un sitio para volver y recomendar.

Rebeca C.

Precioso, acogedor, camas súper cómodas y cena espectacular comida con cariño el desayuno variado y con productos de la zona.
Ahora cuando me toque dormir por trabajo por la zona ya tengo un hotel en el que te hacen sentir en casa.

Rakel T.

El lugar es precioso y el trato respetuoso y muy familiar. Gracias, Valentina y a tu equipo, también.
Perfecto porque une comodidad y tranquilidad.
Los melocotones, riquísimos. Eskerrik asko..

Daniel H.

Estancia de 2 días, muy agradable el sitio, muy bonito todo, habitaciones amplias, desayuno podría mejorar, cena estupenda, buen chuletón que nos comimos, y la sidra tb que nos bebimos. vinimos un grupo de personas para hacer rutas por la zona, muy cerca del Santuario de San Miguel de Aralar