Bar Ribera De Camas - Camas, Sevilla

Juan M.

Primera vez que visitábamos este establecimiento, y no estuvo mal. El servicio con mucha carga de trabajo, las tapas tardaban, llegando a reclamar una que no venía después de haber comido el resto de tapas. La tapa de Brick en crema de queso y pasas, todo era crema de queso, pasas tan solo 3 como mucho. Las demás tapas bien. No se si volvería a repetir.

Miguel M.

De estos sitios que descubres medio por casualidad y te acaban gustando mucho. Lo mejor, y esto no es fácil de encontrar, fue la atención de los camareros: de 10. Gente humilde que lleva toda la vida detrás de una barra y que sabe que tratar bien a la gente es la mejor manera de que vuelvan. ❤

A nivel gastronómico, es un sitio especializado en tapas y raciones de comida casera. Tienen carta amplia. Nosotros pedimos: tapa de chocos, bien fritos; patatas bravas para compartir: la salsa no era casera, pero sí las patatas, y eso siempre se agradece; solomillo a la plancha, buen sabor; solomillo al hojaldre, contundente, con varias capas de carne, queso y salsa; unos huevos con patatas, que aquí no hay fallo; y unas croquetas de puchero, estas sí un poco planas de sabor.

La cerveza, bien fría, como tiene que ser. Precios bastante ajustados para las cantidades que sirven, y con una terraza enorme al aire libre ideal para las noches de verano. Estuvimos muy a gusto. Recomendable.

Victorjose T.

Éste va a ser de tus sitios favoritos.
La calidad/precio es inmejorable, no quedan sitios con ésta calidad a estos precios en toda Sevilla y es el sitio perfecto para ir a comer ya sea con un grupo de amigos o con la familia porque el trato que nos dieron fue espectacular, muy recomendable.

Pedimos de entrantes unas patatas de la casa con unos chorizitos al infierno con una presentación y un sabor espectacular.
Si te gusta la carrillada, está en la textura y sabor perfectos, de 10.
Tambien nos encantó el solomillo al hojaldre, viene con un brick cremoso de queso en una base de mermelada de frambuesa con virutas de frutos secos y una pasita, que si no te gusta se la puedes quitar y listo. También lleva un bálsamo de miel que le da un toque dulzon perfecto.

Pd: guarda sitio porque las tartas son caseras y están brutales, todas muy buenas pero la de chocolate con galletas 🍪 espectacular!

rocio B.

Experiencia inmejorable, comenzando por el rato tan familiar y continuando con la comida, que como siempre, espectacular.
Uno de los mejore platos que he probado el solomillo de hojaldre 10/10

Samuel M.

Buena terraza para comer agusto. Gran variedad de platos y tapas con una fusión de degustación muy buena. Recomiendo pasar a probar, tiene muy buena calidad para su precio.

bernabe C. A.

Hemos ido por primera vez a este espectacular bar, o mejor dicho restaurante, ya que muchos de los restaurantes de Sevilla les gustaría tener entre sus puertas , tanto la presencia de las tapas, calidad o servicio Hemos ido por probar gracias a una publicidad que vimos en una red social, y gracias a eso hemos conocido el mejor bar ( restaurante) de la provincia, bajo mi punto de vista. La comida es espectacularmente buena, super bien presentada, y además el servicio es de 1000. Muchas gracias Paco, por tu amabilidad y preocupación de ver que todo estaba correcto, y también a su compañera que nos ha echo que el servicio sea especial. Os recomiendo este establecimiento 100% y hemos venido de pino Montaño a probar sus tapas, y ha merecido la pena. Volveremos

Rocio F.

Fuimos un día festivo de domingo de Ramos con lo que conlleva eso y fue una experiencia muy buena

Arias D.

¡Qué lugar tan chingón pa’ echarse unas tapas de esas que te abrazan el alma! Desde que llegamos, el ambiente se sintió cálido y familiar, como si llegaras a la casa de un buen amigo. Pero lo que realmente nos dejó con la boca abierta fue la atención de los camareros: gente sencilla, de barrio, con oficio y corazón, de esos que entienden que una sonrisa sincera y un trato amable valen más que mil estrellas Michelin. Son personas que no solo trabajan para servirte, sino que disfrutan hacerlo, y eso se nota en cada detalle. Nuestros hermanos españoles se la rifan con esa calidez que te hace sentir verdaderamente en casa, y eso se agradece muchísimo, sobre todo cuando uno está lejos y busca ese trato humano que nos llena el corazón. ❤️

Pedimos varias tapas para compartir: unos chocos bien fritos, crocantes y en su punto; unas patatas bravas, cuya salsa no era casera, pero las papas sí, y se nota la calidad en cada bocado; el solomillo al hojaldre, con su buena dosis de carne, queso fundido y una salsa que le da un toque especial; y el clásico huevito con papas, que aquí nunca falla y siempre es bien recibido. Las croquetas de puchero estaban un poco planas, pero cumplidoras, acompañando bien el resto de la comida. Para acompañar, la cerveza bien fría, como Dios manda, refrescando cada momento y haciendo más amena la plática.

Los precios son justos y las porciones generosas, que te dejan satisfecho sin que tengas que romper la cartera. La terraza al aire libre es perfecta para dejar que la noche te apapache mientras disfrutas de buena compañía y mejor comida. El ambiente invita a quedarse horas platicando y disfrutando.

Lo que más resalta de este lugar no es solo la comida, que está para chuparse los dedos, sino el trato humano, esa combinación de profesionalismo con calidez que te hace querer regresar y recomendarlo a todos. El personal se toma el tiempo de explicarte el menú, se nota que les importa que la experiencia sea completa, y siempre están atentos sin ser invasivos. En tiempos donde el trato puede ser frío o mecánico, aquí se siente la pasión por atender bien, por hacer que cada comensal se sienta valorado y especial.

En definitiva, si buscas un lugar donde la comida te quite el hambre y el trato te llene el alma, este es el spot ideal. Un pedacito de España con el corazón bien puesto y una calidez que deja huella.