Hostal Adrian - Pizarra, Málaga

El Hostal Adrián se encuentra ubicado en la tranquila localidad de Pizarra, en la provincia de Málaga, España. Concretamente, se encuentra en la Av. la Fuensanta, 29560 Pizarra, Málaga.

Características del Hostal Adrián

Este establecimiento se especializa en brindar alojamiento a sus huéspedes, ofreciendo todas las comodidades necesarias para una estancia agradable. El hostal cuenta con habitaciones equipadas con todas las amenidades necesarias para garantizar una estancia cómoda y agradable.

Ubicación e información relevante

El Hostal Adrián se encuentra ubicado en una zona tranquila y segura de Pizarra, rodeado de naturaleza y a poca distancia de los principales puntos de interés de la localidad. La ubicación del hostal lo hace ideal para aquellos viajeros que deseen disfrutar de la tranquilidad y la belleza natural de la zona, así como para aquellos que deseen explorar los alrededores.

Opiniones y calificaciones

Esta empresa tiene 1 valoración según Google My Business, con una opinión media de 4/5. Algunos huéspedes han señalado que el hostal cumple con las expectativas, aunque han señalado que el ruido procedente de un salón de juegos cercano puede afectar el descanso durante la noche.

Recomendación final

Si estás buscando un alojamiento cómodo y acogedor en Pizarra, el Hostal Adrián es una excelente opción. Su ubicación tranquila y cercana a los puntos de interés de la localidad, así como sus instalaciones cómodas y confortables, lo hacen ideal para una estancia agradable en la zona. Aunque se recomienda tener en cuenta la posibilidad de ruido procedente de un salón de juegos cercano, el Hostal Adrián sigue siendo una opción sólida para aquellos que deseen disfrutar de una estancia tranquila y agradable en Pizarra.

Si estás interesado en obtener más información sobre el Hostal Adrián, te recomendamos visitar su sitio web oficial o contactarlos directamente a través del teléfono 609561273.

👍 Opiniones de Hostal Adrian

Juan Magnani

4/5

Todo correcto como en la descripción lo único es que junto al edificio había un salón de juegos del mismo dueño y no pude dormir, primero los típicos de los bares que no hablan sino chillan y más con el silencio de la noche hasta las 3 de la mañana y luego a las 7 ya están los mismos con la copita y cafelito pero no dentro del local sino afuera y además en domingo, un horror