Almazara Restaurante Pub - Felix, Almería

Isabel S. S.

Nada recomendado y lo peor el servicio
Si vas con ropa de verano (lo lógico en agosto) te hielas con cómo ponen el aire acondicionado. Pedimos cambiar a una mesa que diera menos directo y nos contestaron de malos modos que estaban reservadas (nosotros íbamos con reserva). En las horas que estuvimos allí ninguna de las que no nos dejaron sentarnos se ocuparon.
La comida, luces y sombras: Raciones bastante escasas y aunque las carnes están buenas la mitad de la fritura de pescado llegó fría.
Ah, y si reservas a comer ya no ponen tapa.
Caro en definitiva para lo que es y la cantidad.
Y la acústica horrible también, tienes que gritar para oírte por encima del jaleo y te vas con dolor de cabeza

Patricia M.

Maravillosa terraza, servicio excelente, sonriendo y muy amables, un gusto, la comida deliciosa, volveremos seguro y lo recomendaremos ❤️🥰 y de precio genial!

PATRICIA D. A.

La sala del restaurante está muy bien porque tiene unos ventanales con mucha ventilación y buenas vistas. Los platos están bien, pero la fritada no nos gustó en comparación con la que sirven en otros sitios. Postres caseros y camareros muy amables. Fuera tienen una zona de futbolín y para tomar copas.

B A.

Poder disfrutar de esta comida a tan solo 15 minutos de la capital es otro rollo. Buenísimo todo y el chico que nos atendió muy agradable. La única pega el ruido que había que incomodaba a la hora de hablar.

María D. M. M.

Una maravilla de sitio para comer. Comida casera, servicio estupendo y rápido, calidad-precio inmejorable.
Toda la carne a la brasa buenísima, con verduras o patata caseras y además recomiendo el revuelto de setas y las migas.

Julia G.

El local se compone de una cafetería-pub y restaurante, divididos en dos espacios.
El restaurante ofrece comida tradicional almeriense (trigo, gurullos, arroz en colorao…) así como otros platos mediterráneos, además de tapas variadas. Merece la pena venir y disfrutar comiendo de las vistas que ofrece. Buena relación calidad-precio y buena atención por parte del personal.
He de destacar que con reserva sólo se pueden pedir raciones.

Jose V.

Los bares y los restaurantes de montaña se suelen caracterizar por llenarte el buche hasta que te salga la comida por los ojos a buen precio y este no podía ser menos. A media hora de Almería tenemos una joya como es Felix y si a eso le unimos este restaurante, ¡puntazo! Su nombre confunde, no catarás directamente aceite pero si lo probarás en alguna de sus elaboraciones. Una cosa muy top del local es que cualquiera de sus carnes las puedes pedir a la plancha, a la parrilla o frita. Ya depende de tu maestría como comensal pedir la combinación perfecta. Otra cosa a comentar de la carta es que tienen medias raciones y raciones completas aunque los tamaños engañan. Las medias tienen el tamaño perfecto para una persona y las completas sí que son para compartir. Pedimos como entrantes unos tomates con ajos y un revuelto de setas variado (media), ambos muy buenos. De principales una ración completa de presa a la parrilla y otra de conejo frito con ajos, benditas raciones (eramos cuatro comensales). Los postres también muy buenos tanto la tarta de tres chocolates como la de la abuela. Para finalizar nos pusieron unos chupitos. Salimos a 23 € por cabeza. La única pega que le puedo poner al restaurante es que tardaron bastante en atendernos motivado principalmente por estar lleno (esto habla bien del local). También esto hace que haya mucho ruido ambiental. Mi recomendación querido/a discípulo/a es que aproveches el finde para subir a este bonito pueblo y comas en esta "no" Almazara, me lo agradecerás.

P.D.: Después puedes bajar a Vícar y ver los murales pintados en las calles del pueblo, algo muy bonito y que debes ver. La carretera desde Felix no es muy buena, es preferible bajar hasta la autovía e ir desde allí.

RAFAEL V.

Un restaurante de esos con encanto. Está entre calles empresas del pintoresco pueblo de Félix en lo que empieza a ser la Alpujarra almeriense.
Muy bien decorado, sencillo y con todo el salón acristalado asomado a unas vistas increíbles.
Una carta variada con especial interés en los platos caseros. Muy buena cocina y abundante.
El servicio rápido y atento. Merece la pena, sus migas y la carne al ajillo están espectaculares.